
Estaba la buena de Bibiana (Aído, no el/la otro/a que se llama Manolo), Ministra de Igualdad dando una lección de moral y aburrimiento en el Congreso cuando se refirió a los componentes de cierta comisión parlamentaria como “los miembros y las miembras”.
Me apreté la cabeza con las palmas de las manos mientras pensaba: Yo, una persona sin cargo me puedo permitir el lujo de cometer este tipo de cagadas, pero una ministra, con sus estudios (creo), noooooooooorl. Las risitas serian carcajadas en el congreso. No es para menos. Esta es la apuesta de ZP.
Al día siguiente, en una entrevista concedida a “Los desayunos de TVE”, no se le ocurre otra cosa a la tipa (consulte en el diccionario si esta palabra estaba recogida en femenino) mas que decir que no descartaba que en un futuro se incluyese tal acepción en el diccionario de la Real Academia de la Lengua (Española).
Con las orejas de punta debían estar en esta Institución de la lengua, que gracias a Dios aun no esta politizada, por que poco después Gregorio Salvador, miembro de la Academia, titular del sillón “q” desde el 15 de enero de 1987, declaro lo siguiente: “Eso sólo se le puede ocurrir a una persona carente de conocimientos gramaticales, lingüísticos y de todo tipo. Además, en España no podemos decidir sobre una lengua que se habla en muchos países” y “debería dejarse de bromas de mal gusto y ocuparse de resolver problemas de desigualdad preocupantes que hay en España, como las dificultades que tienen los padres en algunas comunidades para que sus hijos estudien castellano”. Así mismo recordó al Ministro de Sanidad que “la lengua es un sistema económico de expresión y el masculino vale en este caso como término neutro que sirve para masculino y femenino”, en alusión a la frase que dijo sobre el “Consejo de Ministros y Ministras”.
No quiero ni pensar en como pondrán a parir a este académico desde algunos medios de comunicación. Le llamara facha, machista, retrógrado, etc. Que cruz le ha caído. Posiblemente le calienten la cabeza más de lo debido.
Además hice memoria y recordé un artículo antiguo de Arturo Pérez

Con esto, y sin tener nada mas en la recamara, me despido hasta la próxima entrada, pero no sin recordar nuevamente a la madre que parió al Zopla Pollas, ni sin decirle a la Ministra que se ponga a trabajar en serio y de deje de hacer la imbécil, o la imbécila, o como coño/a se diga.